La UNESCO define la alfabetización mediática como un conjunto de competencias interrelacionadas que ayudan a las personas a maximizar las ventajas y minimizar el daño en los nuevos entornos informativos, digitales y comunicacionales.
Una interacción con la información crítica y eficaz; incorporando la habilidad de analizar, sintetizar y evaluar el poder de las imágenes, sonidos y mensajes. También se tiene en cuenta el uso crítico y consciente de las tecnologías digitales y la capacidad para comunicarse competentemente empleando estos medios de comunicación.
La respuesta a la desinformación y a la información falsa requiere una combinación de información crítica, medios de comunicación y competencias digitales, es decir, alfabetización mediática e informacional (MIL).
En nuestra sociedad el conocimiento y la información constituye una fuente de riqueza. Por ello el desarrollo hoy depende cada vez más de la capacitación de las personas en el acceso, uso, síntesis y distribución de información.
La integración digital implica una re-configuración social, cultural y familiar; y expulsa, detrás de la “brecha digital”, a quienes no pueden acceder a este núcleo de información y requisitos digitales.
Los datos, una vez asociados a un objeto y estructurados, se convierten en información. La información asociada a un contexto y a una experiencia se convierte en conocimiento. El conocimiento asociado a una persona y a una serie de habilidades personales se convierte en sabiduría, y finalmente, el conocimiento asociado a una organización y a una serie de capacidades organizativas se convierte en Capital Intelectual”. Carrión Maroto: Introducción conceptual a la Gestión del Conocimiento.
Fuentes
https://www.unesco.org/es/communication-information/media-information-literacy/about
https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000216099